- 600 gr de de atún fresco en filetes gruesos.
- Tres cebollas o cebolletas medianas.
- Dos o tres dientes de ajo.
- Una hoja pequeña de laurel.
- Pizca de pimentón dulce de La Vera.
- Pizca de orégano.
- Dos cucharadas soperas de vinagre de vino.
- Tres cucharadas soperas de vino blanco.
- 100 ml de agua.
- Sal.
- Pimienta negra molida.
- Aceite de oliva virgen extra.
Cortamos los filetes de atún en trozos pequeños y los salpimentamos. Untamos una sartén con un poquito de aceite, la calentamos a temperatura algo fuerte y marcamos los trozos de atún vuelta y vuelta por cada lado; una vez marcados apartamos a una fuente.
Pelamos y laminamos los dientes de ajo. A las cebollas les retiramos las capas superiores y las partimos en juliana.
En la sartén de haber marcado el atún echamos un chorrito de aceite de oliva, suficiente para hacer el sofrito, calentamos y doramos los ajos, seguidamente añadimos la cebolla junto con la hoja de laurel. Sazonamos y freímos a fuego muy suave, removiendo frecuentemente hasta que la cebolla se quede bien pochadita, aproximadamente 20 minutos.
Incorporamos el orégano y el pimentón, removemos unos segundos y seguidamente echamos el vinagre y el vino. Subimos la temperatura del fuego durante un minuto e inmediatamente añadimos el agua e incorporamos también los trozos de atún que teníamos apartados.
Cocemos a fuego moderado hasta que consuma el líquido, aproximadamente cinco minutos.